El ladrido de un cachorro puede ser una forma de comunicación linda y entrañable. Sin embargo, también puede convertirse en una molestia cuando sucede todo el tiempo. Como cuidador, es su responsabilidad comprender por qué su cachorro ladra y cómo entrenarlo para que ladre menos. Sumerjámonos en esto juntos.
Comprender las razones detrás de los ladridos
Antes de que puedas frenar de manera efectiva los ladridos de tu cachorro, es crucial entender por qué ladra en primer lugar. Los cachorros ladran por una variedad de razones.
- Búsqueda de atención: Es posible que tu cachorro esté ladrando porque quiere tu atención o quiere jugar contigo.
- Aburrimiento: Si tu cachorro se queda solo por períodos prolongados o no recibe suficiente ejercicio físico o estimulación mental, es posible que ladre por aburrimiento.
- Miedo o ansiedad: Los cachorros pueden ladrar cuando están asustados o ansiosos. Esto podría deberse a un nuevo entorno, ruidos fuertes o quedarse solo.
Implementación de métodos de capacitación
1. Eliminar la motivación
Tu cachorro recibe algún tipo de recompensa cuando ladra. De lo contrario, no lo harían. Identifica lo que obtienen al ladrar y retíralo. No les dé la oportunidad de continuar con el comportamiento de ladridos.
2. Ignora los ladridos
Si crees que tu cachorro está ladrando para llamar tu atención, ignóralo todo el tiempo que tarde en detenerse. No les hables, no los toques, ni siquiera los mires; tu atención solo los recompensa por ser ruidosos. Cuando finalmente se calme, aunque sea para tomar un respiro, recompénsalo con una golosina.
3. Distrae a tu cachorro
Otro método que puedes probar es distraer a tu cachorro con un ruido. Pero tenga cuidado de no asustar a su cachorro. El objetivo es distraerlos, no asustarlos.
Enseñando el comando ‘Silencio’
Enseñar a su cachorro a comprender una orden de «silencio» puede ser una herramienta invaluable. Aquí hay un proceso simple de cuatro pasos:
- Permita que su cachorro ladre durante unos segundos, luego diga «Silencio» con una voz tranquila y clara. Asegúrese de usar este comando de manera consistente.
- Cuando deje de ladrar, espera unos segundos y dale una golosina.
- A medida que se den cuenta, puede aumentar el tiempo que deben permanecer quietos antes de ganarse la golosina.
- Si tu cachorro empieza a ladrar de nuevo, repite el proceso.
Socializando a tu cachorro
La socialización es una parte importante para reducir los ladridos relacionados con el miedo. Cuantas más experiencias positivas tenga tu cachorro con el mundo, es menos probable que reaccione con miedo y ladre.
- Lleva a tu cachorro a diferentes ambientes: parques, tiendas de mascotas, de paseo por el barrio.
- Permita que su cachorro conozca a diferentes personas y otros perros.
- Premia a tu cachorro por comportarse con calma en situaciones nuevas.
Proporcionar suficiente ejercicio y estimulación mental
Los cachorros necesitan tanto ejercicio físico como estimulación mental para estar felices y sanos. ¡Un cachorro cansado es un cachorro tranquilo!
- Paseos regulares
- Tiempo de juego
- Juegos mentales
- Sesiones de entrenamiento
Cuándo consultar a un profesional
Si ha intentado todo y los ladridos excesivos de su cachorro aún persisten, podría ser el momento de consultar a un entrenador de perros profesional o a un conductista. Pueden brindarle consejos personalizados y estrategias para controlar los ladridos de su cachorro.
Preguntas frecuentes
1. ¿Qué debo evitar cuando intento que mi cachorro deje de ladrar?
Evita gritarle a tu cachorro para calmarlo. Para ellos, suena como si estuvieras ladrando junto con ellos. Además, no castigues a tu cachorro por ladrar. A menudo puede empeorar las cosas.
2. ¿Es normal que un cachorro ladre mucho?
Si bien es normal que los cachorros ladren, los ladridos excesivos a menudo indican un problema subyacente, como aburrimiento, miedo o ansiedad.
3. ¿Cuánto tiempo lleva entrenar a un cachorro para que deje de ladrar?
La duración del entrenamiento varía para cada cachorro y depende de la constancia, la paciencia y el tiempo que dediques al entrenamiento. Puede llevar de unas pocas semanas a varios meses.
Al comprender por qué su cachorro ladra y usar estas estrategias, puede ayudar a frenar sus ladridos excesivos. Recuerda, la clave es la paciencia y la constancia. ¡Buena suerte!